Manías y extravagancias de los cinco jóvenes megamillonarios acostumbrados a jugarse la vida que aspiran a ser el próximo Campeón del Mundo de F1.
POR JAIME RODRÍGUEZ
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Arranca la nueva temporada de la Fórmula 1, la competición de la velocidad, el exceso y el calendario infinito. Como Bernie Ecclestone, el anciano patrón del negocio, se ve con fuerzas (85 años), pretende probar la resistencia de todos con un nuevo sistema de clasificación, un sistema de eliminación sucesiva. Los pilotos han protestado, pero a él le da igual, poco le preocupan sus quejas mientras que hagan lo que saben: conducir al límite. Ellos lo llevan como pueden, cargando caprichos, sueldos millonarios, novias exuberantes y tentaciones de todo tipo. Conviven en hoteles, hacen viajes a veces de 15 horas butaca con butaca en primera clase y desfasan en las mismas fiestas, pero de amistad entre ellos ni hablamos. Son un gremio muy particular. Como previa del Mundial, en la revista Don repasamos las manías y excentricidades de los cinco aspirantes al título.
Lewis Hamilton (Inglaterra, 31 años)
ESNIFAR WASABI – JETS PRIVADOS – PELEAS – MÓNACO Y HOLLYWOOD – NOVIAS STARLETTS – CHUCHOS DE POSTÍN
‘¿A QUE NO TE ESNIFAS EL WASABI?’. Al actual campeón del mundo le gustan las apuestas escatológicas, casi al estilo Jackass. La de la salsa japonesa se la hizo cumplir a su colega Adrian Sutil (ex piloto de Sauber) en el restaurante Nobu de Melbourne. Casi vomita la cena. Ambos hicieron buen dúo, con pelea muy sonada (ellos contra gente de Lotus) en una fiesta de Shanghai como cima de sus andanzas.
EL ACTUAL CAMPEÓN DEL MUNDO NO DISIMULA. Con su primer gran sueldo en Mercedes se compró un jet privado y lo pintó de rojo fuego. El gusto, un Bombardier CL-600, le costó 23 millones de euros, mientras sus asesores se llevaban las manos a la cabeza. Michael Schumacher tenía el suyo, pero la nueva hornada de pilotos no suele pagarse de su bolsillo un avión. Las escuderías los ponen al servicio de los pilotos si los lujos de la primera clase de las compañías regulares no les bastan.
LEWIS ES ESPECIAL. vive a caballo entre Mónaco y Hollywood, donde está su novia, la cantante Nicole Scherzinger, y gasta maneras de estrella de hip hop.
SUS FOTOS EN TWITTER parecen de catálogo de gafas de sol (no son muy naturales, que digamos) y sus citas filosóficas aturden a los fans más entregados.
A ROSCOE Y COCO, sus cachorros de bulldog, les ha hecho famosos. Incluso pidió para ellos una acreditación para que pudieran caminar libremente por el paddock. Se la denegaron.
EN 2015 DEFIENDE EL TÍTULO MUNDIAL, pero tendrá un año complicado de puertas para adentro. Acaba contrato y para continuar en Mercedes ha pedido casi 40 millones de euros por curso. Sus jefes, presionados por los fuertes sindicatos de la compañía alemana, han dicho que se olvide de semejante salario.
EL RETO QUE TIENE POR DELANTE ES DURO: ganar su tercer título, derrotar a su compañero y primer rival (Nico Rosberg, el niño bonito de Mercedes) y convencer a su equipo de que merece el aumento.
Nico Rosberg (30 años, Alemania)
MONTECARLO COMO PATIO DE JUEGOS – PUTADAS AL COMPAÑERO – NO SIN MIS MOCASINES – IBIZA ICE CREAM
AL HIJO DE KEKE ROSBERG, campeón del mundo de F1, no le verá nadie en zapatillas por los circuitos. Cuando no lleva puesto sus botines de piloto, calza mocasines. Derrocha estilo el compañero de Hamilton y gran aspirante esta temporada a ganar el título. Ya lo rozó el pasado año con ese Mercedes arrollador.
LE ACHACAN FALTA DE AGALLAS AL CHICO, aunque de talento va sobrado. Habla con soltura seis idiomas y reconoce que su infancia en Montecarlo no fue cualquier cosa. A él le despertaba por la mañana el ruido de los monoplazas cuando bajaban por las calles del Principado, durante el Gran Premio.
SU ROSTRO QUERUBÍN TORNÓ EN DIABLO EN SPA, el pasado año, cuando rompió las reglas de equipo y parte del monoplaza de su compañero cerrándole en una curva. Hamilton denunció que había sido aposta y Rosberg puso sonrisa malévola.
LA AMISTAD INFANTIL DE AMBOS, compartiendo muchos años de karts y viajes, saltó por los aires en la pasada temporada. La F1, que no perdona. Este verano no compartirán barco en Ibiza, isla favorita del alemán. Allí ha inaugurado con su novia una heladería.
NICO NO SOLO APARCA EL GLAMOUR DURANTE LOS TEST de pretemporada, cuando se aloja en una caravana a pie del circuito en vez de en un hotel. Este pasado mes de febrero, en Jerez, plantó su casa rodante junto a la pista. Allí entraba y salía con porte aristocrático. Y en mocasines.
Fernando Alonso (34 años, España)
PONTE PELUCA – EL PLAYBOY DE MI MENTOR – NOMBRES FALSOS – CÓMO FASTIDIAR A TU COMPAÑERO – JETSKI
SI USTED, QUERIDO LECTOR, pasó alguna vez por el Carnaval de Oviedo, bien se pudo cruzar con el bicampeón asturiano. No daría pistas, pero bajo la máscara y la peluca, el piloto disfrutaría de los escasos paseos que da a lo largo del año por su ciudad.
LE GUSTA LA DISCRECIÓN al protagonista de la Fórmula 1 en España, responsable del renacer del deporte ya hace una década, cuando enlazó sus dos títulos mundiales bajo el manto de Flavio Briatore. Del gigolo italiano aprendió a saber moverse por un paddock de pirañas, sin imitar sus exageradas formas, tendiendo siempre a ir por la sombra.
EN DUBAI, CIUDAD DONDE RESIDE AHORA, participa en carreras de motos acuáticas y en competiciones de karts con nombres falsos. Revienta registros y se marcha bajo su casco.
OTRO DE SUS ÚLTIMOS RÉCORDS fue colar el pasado a año en una de las fiestas más exclusivas de la F1, en Austin (Texas), a ¡¡45 mecánicos de Ferrari!!
ALONSO – QUE DEBUTARÁ EN LA SEGUNDA CARRERA POR PRECAUCIÓN – afronta un año muy importante, tras regresar a McLaren después de su paso por la Scuderia. De rojo no logró el objetivo de la tercera corona. Ese Mundial pendiente lo busca ahora en la casa plateada, de donde tuvo que salir en 2007 por culpa de un histórico duelo interno con Hamilton, el único compañero que le hizo sufrir. Al resto, los tritura. ‘No entendía nada. Se bajaba del coche y decía que todo iba bien, cuando nada funcionaba en ese cacharro’, protestaba Nelsinho Piquet, joven e incauto colega de escudería que sufrió al español en Renault.
COMO BUEN APRENDIZ DE MAGO, los juegos psicológicos le encantan a Alonso. En Ferrari, colgaba una pequeña canasta en la habitación de su motorhome a la que tiraba con escasa puntería. Los pelotazos impedían la siesta de Raikkonen, en el cuarto contiguo.
Sebastian Vettel (28 años, Alemania)
LA COFRADÍA DEL PUÑO – PERFIL BAJO AMOROSO – EL CARPINTERO BEATLEMANÍACO – MOTES PICANTES
EL CUATRO VECES CAMPEÓN DEL MUNDO es una ‘rara avis’ dentro del gremio de pilotos, alejado del patrón que gastan sus compañeros. Su novia es la de toda la vida, una estudiante alemana, no derrocha ni un euro y evita fiestas.
SOLO SE DEJÓ VER EL PASADO AÑO por la de cierre de Mundial, en Abu Dhabi. El evento, llamado Amber Lounge, reunió a la mayoría de la parrilla, aunque en la pista de baile apenas hubiera roce entre los diferentes clanes. Vettel estuvo bien marcado por su chica, mientras que otros se movían con más libertad en la selva de los reservados.
EL ALEMÁN ES DE CENAR EN EL CIRCUITO junto a sus mecánicos y gustos caseros. Le encanta la carpintería, como a su padre, y la música de los Beatles.
TIENE FAMA DE TACAÑO y revela, medio orgulloso, que una vez se pasó una semana en Australia con el mismo billete de diez dólares en el bolsillo.
CUANDO VIVÍA EN SUIZA PREFERÍA LIMPIAR ÉL SU APARTAMENTO a contratar a nadie para hacerlo. Ahorrador Sebb, que ha buscado en Ferrari el buen contrato que no tenía en Red Bull. La firma italiana le pagará cerca de 15 millones de euros por año para intentar salir de la crisis de resultados.
LA FORMALIDAD DE LA SCUDERIA impedirá que el fichaje estrella, como hacía en su anterior equipo, bautice el nuevo coche. En la marca energética, Vettel siempre ponía motes picantes a sus monoplazas.
Kimi Raikkonen (36 años, Finlandia)
EL REY DE LA FIESTA – NO SIN MI YATE – CABEZADITAS INOPORTUNAS – BADASS A 300 KM / H – FUCK’EM ALL
LOS INMENSOS PORTEROS DE LA DISCOTECA DEL HOTEL FAIRMONT DE MONTECARLO no identificaron al tipo en bermudas, gorra de skater y pelo largo. Intentó entrar sin éxito junto a seis amigos de un grupo de rock finlandés. Mientras que estos protestaban por el stop obligado, Raikkonen se esfumó solo sin levantar la visera ni rechistar un ‘no sabéis quien soy yo’. Le esperaba seguramente un destino mucho más sugerente.
LA LEY DE KIMI, un tipo callado en las reuniones de ingenieros -donde incluso pega cabezadas-, que sí sabe elevar la voz en sus míticas juergas. La leyenda le mezcla con auténticas jaranas de película, saunas alegres, carreras de lanchas y eruptos a la prensa.
GANÓ EL MUNDIAL que Hamilton y Alonso dejaron escapar en McLaren (2007) y ahora estira su carrera en Ferrari, donde el pasado año completó un curso para olvidar. Ahora coincide con Vettel, buen colega, aunque distintos en todo.
KIMI GASTA CON LOCURA EN MOTOS DE ESQUÍ en Harleys, en superdeportivos, en yates… Dejó la F1 con un finiquito de 20 millones que se gastó en el Mundial de Rallys, para regresar otra vez a los monoplazas.
ES EL TERROR DE LOS PATROCINADORES, tan impuntual como poco amigo de los actos de relaciones públicas. ‘De este negocio sólo me gusta la velocidad y el dinero’, reconoce. La ley de Kimi, un tipo salvaje que está a punto de ser papá.
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