Texto, fotos e ilustraciones por Jorge Esteban
Cuando los chicos de Ubisoft nos invitaron a San Francisco a la presentación internacional a los medios de su último juego WATCHDOGS 2, por poco nos caemos de la silla del gusto…
Y es que sólo 3 medios españoles estuvimos presentes en el evento, rodeados por lo más granado de la prensa especializada mundial, nos dejamos arrastrar en una aventura sin precedentes para nosotros, dónde descubrimos que la creación de un videojuego es algo más que un grupito de programadores devoradores de comida basura y con la vida social de una ameba, encerrados en una habitación oscura. En realidad no tiene nada que envidiar a una gran producción cinematográfica de Hollywood, hay mucho trabajo, mucha gente, mucho talento y mucho dinero para conseguir poner en marcha un juego de estas características.
Por lo pronto la puesta en escena de la presentación fue impecable, una antigua fábrica tuneada y maquillada al efecto, en el mismo centro de San Francisco, nos invitaba a sumergirnos en el sórdido y exclusivo ambiente hacker urbanita, a base de luces de neón, pantallas de plasma, ordenadores y stands corporativos. Un Dominic Guay (Productor Senior) pletórico, ejerció de maestro de ceremonias arropado por un despliegue de colaboradores, animadores, artistas, creadores y programadores que nos ofrecieron un pequeño atisbo del ingente trabajo y de la interminable variedad de disciplinas en las que se estructura una macro-producción de este tipo.
¿Y porqué San Francisco?
San Francisco es la cuna de la comunidad Hacker norteamericana, ahí comenzó todo. En ese tramo de la costa Oeste, entre Palo Alto y San Francisco nos encontramos con Silicon Valley donde se sitúan el mayor número de compañías y expertos tecnológicos del mundo. Desde finales de los años 50 y hasta bien entrada la década de los 80 hubo una explosión tecnológica sin parangón que propició la aparición de nuevas empresas y servicios relacionados con la elaboración y desarrollo de nuevas tecnologías. California recibió con los brazos abiertos a toda esta comunidad de empresas y cerebritos informáticos, AMD, Signetics, Intel, y cómo no, la ínclita Apple Computer son algunas de las empresas que se instalaron en el antiguo valle de Santa Clara. Eso sin duda fue el caldo de cultivo ideal para la proliferación de pequeños grupos de informáticos de élite, que se convirtieron en los primeros hackers, y que forjaron una leyenda creando un precedente que cambió la forma de entender el mundo del ciberespacio hasta ese momento.
Violet Blue hacktivista, escritora y colaboradora de Ubisoft como experta en el mundo Hacker, nos explica como la ciudad del Golden Gate se ha convertido en uno de los epicentros mundiales de la comunidad ciberactivista, y nos desvela los dos tipos de hackers que pululan por la red, los “Black Hats” que vienen a ser los los ciberdelincuentes puros y duros, responsables de los principales y más dolosos ataques informáticos de las últimas décadas y los “White Hats”, también llamados hackers éticos, que sin abandonar el activismo social, utilizan sus conocimientos en pro de la sociedad y muchos de ellos acaban empleados como expertos en seguridad informática para las grandes empresas del sector. Aparentemente existe también un universo paralelo de servicios que van desde el espionaje industrial hasta el acceso a información privada de los propios usuarios, pasando por el hackeo gubernamental y el sabotaje industrial. El mercado negro de los metadatos es un gran supermercado dónde todo está en venta.
¿Realidad o ficción?
Es cuando menos inquietante que un juego de ordenador se acerque tanto a un contexto sociocultural tan aparentemente alejado de nuestra realidad, pero que sin duda, si lo analizamos con calma, es nuestro pan de cada día.
Y es que el timing de la salida del juego parece perfecto. El mundo del hacking y la influencia de las nuevas tecnologías en nuestra vida diaria, son temas de rabiosa actualidad. El éxito de Mr. Robot, el estreno de la última película de Oliver Stone sobre Snowden, la distopía demoledora de la última temporada de Black Mirror, y los recientes ataques cibernéticos a Dyn, uno de los proveedores más importantes de infraestructura de internet para grandes firmas como Twiter, Netflix o Spotify, podrían tranquilamente ser parte de la trama del juego.
El hacker está de moda, pero ¿ Qué es un hacker realmente? ¿ Qué imagen tenemos de él?
Violet nos explicó que el perfil del hacker es mucho más global, más cercano de lo que nos imaginamos. Son gente con inquietudes muy variadas, con vidas muy adaptadas y con una completa integración en el sistema. Escritores, artistas, profesores de universidad, empresarios…
Hay que alejarse del estereotipo del hacker con problemas de sociabilidad, drogadicto, blanco, freak, gordo que vive con su madre y pensar en personas reales, que son parte de la comunidad hacker hoy en día y que no tiene nada que ver con lo que vemos en la tele.
La misma Violet Blue es una escritora de literatura erótica de fama internacional con libros publicados como “la Guía del Cunnilingus” o “la Guía de la Fellattio”, participante habitual en los programas de Oprah Winfrey y consultora de seguridad informática para grandes empresas. Ella aporta el punto de conexión directa entre el mundo real de esta comunidad y su recreación en el juego.
Dado su currículum no pudimos dejar de preguntarle qué pensaba sobre la doble moral americana en relación con el sexo y la violencia, y qué influencia había tenido ella en el script final del juego. Entre risas nos contó que sólo era una consultora externa y que coincidía con nosotros en el análisis. En Estados Unidos sigue escandalizando más un pezón en la tv. que un asesinato en directo.
El juego
Este es un juego que trata de hackers, por y para hackers, nos pone en la piel de Marcus Holloway, un joven afroamericano afincado en San Francisco, que es el prota de la historia y nos introduce de lleno en el submundo de los reventadores de ordenadores y masters del ciberespacio.A través de él, descubriremos una serie de personajes y tramas que independientemente del aspecto lúdico y de entretenimiento del producto, no deja de ser un reflejo bastante certero de una realidad cada vez más cercana al imaginario gamer. En palabras de Falko Poiker (World Director), la verosimilitud es uno de los aspectos más cuidados del juego, la capacidad inmersiva de un universo lo más real posible y que es uno de los puntos de los que más orgulloso se siente el equipo de producción.
De todas formas, tal y como nos comentó Jonathan Morin (Director Creativo), la persecución obsesiva de un acercamiento lo más posible a la realidad no sólo se reduce al background contextual del tiempo que vivimos, o a una reproducción técnica y artística sublime del mundo que nos rodea, sino que abarca también al propio concepto del juego, en el que las decisiones morales que tomemos a lo largo de la trama tendrán consecuencias. En esto quería incidir nuestro entrevistado, ya que en la primera parte del juego que salió en el 2014 existía una especie medidor de popularidad que a ojos de su creador desvirtuaba un poco la toma de decisiones, ya que las supeditaba a una valoración externa de juicio moral y que en esta nueva edición desaparece por completo, dejando en manos del jugador la capacidad de elección.
El juego es un Sandbox de recorrido libre, situado en un San Francisco increíblemente recreado en 3d, con una profusión de detalles inusitada y con un mimo y minuciosidad que te sumerge tanto en la historia como en la misma ciudad, provocando una experiencia inmersiva completa y demostrando que los chicos de Ubisoft escuchan a sus gamers e incorporan muchos de los elementos de jugabilidad sugeridos a traves de las redes sociales o a través de encuentros directos. La conducción ha mejorado, la trama no es tan oscura, el motor gráfico es excepcional y tanto la música como los efectos de sonido te transportan inmediatamente a las calles de un San Francisco muy cercano y muy, muy real.
El mundo de WATCHDOGS 2
¿Cómo consigues que un entorno virtual sea creíble en un videojuego? Según Falko Poiker (World Director) con mucho trabajo y con mucha gente. Y es que aquí es donde se ve el presupuesto. Para la recreación virtual de la ciudad y los entornos, no sólo se tuvieron en cuenta los aspectos gráficos, sino que se profundizó en las variaciones climáticas, el tipo de gente de cada vecindad, los sonidos , los acentos, el tipo de luz , los vehículos, la ropa …
Para la inclusión de los efectos de sonido, por ejemplo, Olivier Girard (Audio Director) nos contó que pusieron micrófonos en distintos puntos de la ciudad, de manera que durante el juego, dependiendo la ubicación en la que te muevas, oirás el ferry de la bahía o las campanas de la iglesia del barrio, ¡¡¡Incluso el acento de las conversaciones de tu alrededor cambiará!!!.
Miles de grabaciones a lo largo y ancho de la ciudad componen un universo sonoro personalizado ad hoc para el juego, en el que se incluyen músicos callejeros, conversaciones de bar, grabaciones y entrevistas de vecinos de la zona y sonidos a pie de calle para que al cerrar los ojos te creas que estás realmente sentado en un banco en el Pier 39 o a punto de tirarte por el Golden Gate.
De la misma manera Sidonie Weber (Art Director) nos explicó que se pusieron en contacto con distintos artistas callejeros para que les hicieran expresamente obras para incluirlas en el juego y que se colaron en los barrios más peligrosos de la ciudad como el de Tenderloin, escoltados por la policía para poder estudiar a la gente y las características del barrio, o recorrieron los patios interiores de las casitas adosadas de la parte del puerto para descubrir jardines escondidos o pequeñas obras de arte que normalmente están fuera de la vista del espectador.
Conclusión
El resultado final es realmente espectacular, sin duda no sólo es una de las recreaciones virtuales más esmeradas y detallistas que hemos experimentado en un juego sino que es una experiencia de gaming muy recomendable, tanto por el trasfondo como por la jugabilidad y la trama. No nos olvidemos que es sólo un juego, un entretenimiento, y como tal es divertido, te lo vas a pasar bien jugándolo.
Merece muy mucho la pena darse un garbeo por el San Francisco de WATCHDOGS 2.
¡¡¡¡No te lo pierdas !!!