Los Nastys eran esos chavales malasañeros que disfrutaban haciendo apología de la juerga y tocando canciones gamberras en garitos cutres. Dos años después de que supiéramos de su existencia siguen haciendo lo mismo, pero además han fichado por un subsello de Warner, han tocado en los principales festivales del país (y fuera de él) y se acaban de sacar de la manga un primer largo, Noche de Fantasmas con Los Nastys, con el que ya no habrá quién no los tome en serio.
Se pasaron por nuestras oficinas justo antes de embarcarse hacia Austin (son una de las bandas elegidas por la plataforma Sounds From Spain para representar a España en el SXSW) y nos contaron “cómo han cambiado y qué les ha quedado” en estos dos años.
Contadme, ¡nuevo disco! Estáis recibiendo muy buenas críticas. ¿Notáis tanta diferencia entre los EPs y el LP? ¿os sentís más maduros musicalmente?
Fran: Sí, claro, a base de hacer cosas, girar y grabar, vas acercándote más a lo que tienes pensado.
¿Os váis gustando también más a vosotros mismos o simplemente estáis explorando nuevos caminos?
Luis: Siempre hacemos lo que nos apetece, no porque seamos una banda de tal estilo hacemos sólo eso. Pero, básicamente, como siempre tenemos los mismos instrumentos todo suena con esa coherencia.
Bueno, también se nota que hay más nivel en el manejo de los instrumentos. La guitarra al final de No hay amor en las calles es impresionante.
Luis: Pues eso, es cuestión de ir probando cosas que siempre nos habíamos imaginado hacer y que ahora hacemos. Y en el futuro haremos más… Pero siempre a lo loco.
¿Qué ha cambiado para el grupo el hecho de fichar por un subsello de Warner?
Fran: Para nosotros es la hostia. Para un grupo que está empezando que le apoye un sello grande es la hostia. Sin ellos probablemente no estaríamos haciendo la mitad de cosas que hacemos.
Con Paco Loco (productor de su último disco), ¿qué tal?
Fran: Joder, fue la hostia. Estuvimos nueve días grabando con él. Estábamos alojados en su casa y estar ahí todo el día te motiva mucho. Estás a tope pensando todo el rato en el disco. De hecho, allí compusimos un montón de canciones. Para nosotros fue una experiencia de la hostia porque nunca habíamos hecho esto de estar todos metidos en la casa, 24 horas componiendo. Eso fue también algo que hizo que hiciésemos todo mejor.
Luli: Es que estás ahí 24 horas al día: comes ahí, duermes ahí, grabas ahí, mezclas ahí, vas escuchando los temas. Estás todo el rato únicamente focalizándote en el disco, luego no te vas a casa. Creo que lo aprovechamos al 100%.
¿Elegisteis vosotros a Paco? ¿Fue idea vuestra?
Fran: Sí, claro. Ya habíamos escuchado cosas suyas, sabíamos que había estado con los Parrots y lo que escuchamos nos gustó mucho. Pero también es conocido por otras cosas que no son tanto de nuestro rollo.
¿Cómo fue eso de cerrar el disco con una canción lenta? (“La lenta”)
Fran: Cuando hicimos la canción pensamos que pegaba para despedirse, como final de algo. Nos pegaba mucho como última canción y como era de ritmo lento, no nos rayamos con el nombre y dijimos: venga, la lenta.
Luis: También la pensábamos como una música agradable, como cuando vuelves por la mañana a tu casa, que no sabes muy bien si estás bien o estás mal.
Fran: Estás con la resaca del after y te vas contento pero a la vez melancólico.
Vuestros videoclips tienen siempre un rollo muy sucio, muy noventero, de VHS, sobre todo el último Never digas never. ¿es el resultado aplicar imaginación a la falta de medios? ¿o si tuviéseis un presupuesto de millones seguiríais haciendo lo mismo?
Luis: Si tuviésemos millones intentaríamos hacer algo que también estuviese guay. También nos raya mucho el hecho de centrarte mucho en los medios y que después la historia sea una cagada. Aprovechamos lo que tenemos y si vamos teniendo más medios haremos cosa más elaboradas.
¿Las ideas siempre son vuestras?
Fran: Sí, casi todo lo sugerimos nosotros y la persona que graba aporta cosas.
Luis: Hasta el momento, desde los más profesionales hasta los más caseros, están hechos por amigos nuestros, que son gente que nos entiende bien y están en la misma onda. El último videoclip que hemos grabado esta misma semana, de la próxima canción, Baby, lo hemos grabado con colegas que son skaters y también tienen sus propias productoras, Beat TV y Seven Math, y ahí uniendo fuerzas hemos grabado otra fiesta entre los amigos.
Fran: Éste ha sido con más medios, teníamos cámara VHS, se grabó también 4K,… Estaba todo muy bien montado, es el videoclip mejor preparado que hemos hecho. Pero que va a quedar guay, va a muy estar loco, en la misma onda de las cosas que estamos haciendo. Saldrá a finales de marzo o primera semana de abril, dentro de poco.
Habéis cambiado de batería (Luli, que antes estaba en Los Wallas, por Gonzalo) ¿cómo os ha afectado este cambio a la banda y al sonido?
Fran: Para nosotros ha sido la hostia. Lo hemos notado un montón, ha sido un cambio, en general, a mucho mejor. Hay mejor ambiente, vamos todos a una. Antes era una movida, estábamos enfocados en hacer las cosas pero también había otros problemas. Pero ahora con Luli todo es más fácil, ella toca de puta madre, hay un ambiente de la hostia, y nos llevamos súper bien.
¿Cómo es integrarte en una banda que ya tiene sus propias canciones?
Luli: Ha sido un poco raro porque no eran canciones que haya hecho yo, y aunque sean fáciles de ejecutar, cuesta un poco pillarles el punto. También supone tocar con gente nueva… Pero estaba claro que eso iba a ser al principio, que era algo que se iba a pasar. Las canciones antiguas mantienen la base rítmica pero hay algunas cosas que las toco más a mi manera. Y las nuevas ya las grabé yo y las compusimos entre todos. Lo único malo, si podía haber algo malo de formar parte de Los Nastys, era que ya no iba a poder ir a los conciertos. Lo pensaba y al principio no lo pasaba muy bien porque tenía que tocar muy rápido y no estaba acostumbrada a tocar tan rápido, luego ya le pillé el punto. Ahora mismo ya ni lo pienso, tocando me lo paso mucho mejor. Pero volverte loca, meterte en el pogo, liarla un poco…
Ésta puede ser una pregunta bastante obvia, pero… ¿Los Nastys son un grupo de estudio o de directo?
Fran: Lo que le mola a la gente es los directos y siempre nos lo dicen, que los directos son la locura. Hay mucha gente a la que hemos convencido al vernos en directo. Aunque ahora acabamos de sacar un disco con el que estamos muy contentos y queremos que la gente lo escuche porque hay cosas que no estaban en los EPs.
Si pudierais elegir un lugar, una cantidad de gente…¿cómo sería el concierto ideal de Los Nastys?
Fran: ¡En el infierno!
Luis: Justo el concierto más espectacular sería que nos cogiesen para la banda que cierre el fin del mundo en el día del Apocalipsis. Que estuviesen ahí todos los que fuesen a ir al infierno que viniesen antes al concierto y ya luego nos vamos juntos. Y que también hubiera monos y niños pequeños. Un concierto en la vida real sería otro con animales y con niños.
Luli: De hecho ha habido algunos conciertos con niños.
Igual para un conciertos para niños no pegáis mucho…
Luis: Sí, sí, pegamos mucho. Nosotros somos cuentacuentos para los niños.
Y este nuevo disco: ¿dónde y cuándo aconsejáis escucharlo?
Fran: De after.
Luis: Yo recomendaría que te lo pusieras cuando vas en el metro a trabajar.
Fran: Cuando te despiertas, para que te de energía.
Luis: También si viniesen colegas tuyos a casa o una chica o chico que te mola. También te diría que te lo pusieses si te vas de viaje con tus amigos y conduces a toda castaña. Y también para recoger el after. Y este verano en la piscina: para tirarte en bomba a muerte… y seguro que explotas.
Habéis estado en algunos festivales como el FIB o el Esmorga Fest, ¿es necesario entrar en el circuito de festivales para hacerse un hueco en la música?
Fran: Todos los años cae uno, pero molaría estar cada verano en varios. Hemos estado en el Arenal dos veces, en el FIB, en el Sonorama tres veces, y luego festivalillos por ahí.
¿Os gustan los festivales?
Fran: Sí, nos gustan pero ya no vamos mucho como público.
Luis: Guardamos un poco el equilibrio entre cosas grandes y cosas más underground que nos molan.
Fran: En los festivales se pierde mucho porque la gente está más pendiente de beber y del grupo grande, no es lo mismo, te ven lejos. Está de puta madre la experiencia y te lo pasas súper bien pero no es lo mismo que estar en una sala en la que sabes que la atención la tienes tú. Cuando tocas en un festival te vienes arriba, es otro tipo de concierto pero tú tienes todas las esperanzas puestas pero está todo muy limitado, el tiempo… es muy difícil hacer el show que tú quieres en el tiempo que te dan, te quedas con la sensación que podría haber sido mejor, pero igualmente sigue siendo la hostia.
¿Qué esperáis del SXSW?
Luis: Va a ser muy loco eso. Es nuestra primera vez en EEUU.
Fran: Esperamos que la gente piense “hostia puta, Madrid, me cago en la hostia”. Que pregunten si hay más locos por aquí y se vengan.
Luli: Lo que molaría también es que como allí se hacen tantos conciertos, hay casi como 2.000 bandas en el festival, que a medida de que la gente nos vaya viendo nos propongan más conciertos. Es un poco la dinámica del festival como puede ser aquí el Monkey Week, en formato más pequeño. Eso para mí sería lo suyo. Que luego a partir de ahí nos propongan cosas para más adelante, ya sería lo máximo, pero por lo menos estando allí que de manera inmediata a la gente le guste y se generen cosas. Llamar la atención, básicamente, porque es muy difícil habiendo tantas bandas.
¿Por qué creéis que os ha escogido a vosotros para representar a España?
Luli: No tengo ni idea.
Luis: Supongo que buscarán criterios como capacidad de proyección.
Fran: Hay muchas bandas pero no todas tienen un sello que les pueda apoyar o una posibilidad real de abrir mercado. Nosotros vamos a gastarnos muchísimo dinero porque creemos que merece la pena, porque tenemos un plan hecho para que si todo va bien funcione dentro de poco.
¿Lo de cantar en español lo véis como un pro o como un contra?
Todos al unísono: ¡Un pro!
Luis: Es algo exótico, es el idioma del cachondeo.
Luli: Aparte que si cantáramos nosotros en inglés los americanos e ingleses tampoco nos entenderían.
Luis: Además que cada uno tiene que cantar de lo suyo, si a ti un artista sea del país que sea te llega es por el mensaje que canta. Si toca que está hablando de cosas de tu propio país y te sientes identificado pues debuti, pero también escuchas música de otros países y hay gente que se siente identificada también. Si no no tendría sentido porque hablar de, yo qué sé, Rajoy en inglés…
Fran: Bueno, nosotros no hablamos de Rajoy…
Hace unos años se hablaba del surgimiento de la escena de los chinos y las latas en Malasaña, ¿Qué ha pasado en estos años con esa escena?
Fran: Ahí sigue, eso no muere.
Luis: Hay nuevas incorporaciones, hay chavales con bandas más jóvenes todavía, como los Ramblings, que tienen 17 años.
Fran: Ahora hay quinientas mil bandas que están intentándolo y ya veremos. Yo lo que veo es que la gente ya está tirando a otras cosas como la electrónica y el hip hop. Pero el garaje y el rock siempre ha estado ahí siempre y seguirá.
¿Qué pensáis de los detractores del garaje, que lo consideran como un estilo obsoleto, deudor de los grupos de los 70?
Fran: Creo que es un ciclo que siempre pasa. En los 90 pasó igual, surgió el rap y el hip hop y la gente decía que el rock estaba muerto. Pero no. Luego pasaron 10 años y surgió otra vez, luego pasaron 15 años y está otra vez de capa caída… es un género que lleva un montón de años y que no tiene pinta de que se vaya a acabar. Va a ir cambiando pero nunca va a morir el hecho de tocar con guitarra, bajo y batería.
¿Qué tal por México?
Fran: La hostia, estamos deseando volver, la gente ahí nos quiere un monton y nosotros a la gente. Era muy raro, la primera vez sentías como que ya llevabas allí mil años, la gente te conocía, sabía todo, todo el mundo nos quería llevar a todos sitios, la gente se venía de fiesta con nosotros.
Luis: Se sabían las canciones, ¡todas! De puta madre, así da gusto. No tienen miedo a la muerte.
Fran: Había 100 pogos y les da igual si se rompen la nariz, se quedan ahí hasta que acabe el concierto. O se van al hospital y se toman un mezcal.
¿Con qué estilo musical os identificaríais?
Fran: Rápido y violento, pero suave.
Luli: Violentamente suave.
Luis: Como una pelea en el colegio en la que luego haces las paces.
Fran: De pogos en el conciertos empujándote y casi al filo de darte de hostias con alguien pero luego te das la mano y te tomas unas birras.
¿Qué os caracteriza, qué os hace diferentes, qué puede esperar una persona que no haya escuchado jamás a Los Nastys?
Luis: Porque es como cuando no quieres estudiar y empiezas a leer libros que no tienen nada que ver con los estudios, lees cómics o juegas a videojuegos a escondidas. O fumas un porro a escondidas. Como esa sensación de que te van a pillar.
Fran: Como que es muy loco, muy violento, y sin ponerte mucho a reparar qué estás haciendo, pero que tiene algo dentro de verdad, sincero, no como pretendiendo hacer algo o ser alguien.
Te gustarán Los Nastys si te gusta…
Fran: A nosotros nos mola el garaje anglosajón, los Fat White Family, Black Lips, King Gizard & the Lizard Wizard, pero lo que nosotros hacemos no se parece tanto.
Luis: Si escuchas cualquier tipo de música que te incita a salir a la calle, a beber, a comportarte de lo que sea. Eso puede ser cumbia, rock and roll, música electrónica… De vez en cuando también se cuela algo de trap… para nosotros no existe una causa musical, de decir escuchamos esto a muerte y nos sintamos identificados con el punk del 77 o el rock de los 50, hacemos esta música porque es la que nos sale y escuchamos muchas cosas.
No te gustará si escuchas…
Luis: Operación Triunfo.
Fran: Si te gusta el rock and roll e incluso el hip hop o la electrónica, te pueden gustar Los Nastys.