Puedes leer el reportaje íntegro sobre el festival El Sol en el nº 7 de Revista Don (mayo 2014) GRATIS en el App Store (iPad) y Play Store (Android)
Pez gordo y fundador de la agencia La Despensa, jurado del Festival de Publicidad El Sol, ser humano huracanado y uno de los animadores oficiosos del evento, Don Miguel Olivares nos regala una Guía Esencial Para Aprovechar Hasta El Último Rayo De Sol como si uno fuera, en sus propias y sabias y retumbantes palabras, “de BILBAO, ¡¡¡LA HOSTIA!!!”.
LA GUÍA EN FORMATO FANZINE
La revista Don obsequia con este fanzine (también sabemos hacer cosicas en papel) a los asistentes al festival [ Si nos visitas en nuestro stand, te lo regalamos en papel ].
Atomate nota si subes a Bilbo, he aquí unos tips festivaleros. Como no podía ser de otra manera, básicamente son consejos para procurarte algo de comer y de beber y así aguantar este trabajo tan duro y sacrificado como es estar de festival. Aúpa.
Para ir abriendo boca, y que el estómago suene a Txalaparta, no te pierdas la conferencia, la tarde del jueves a las 19:30, del peruano Virgilio Martínez, uno de los chefs más reputados del mundo, junto al creativo más abrazable de la profesión, Gonzalo Figari. Creatividad y gastronomía haciendo un maridaje perfecto. Saldrás con más hambre que el Olentzero.
Te recomiendo que, según salgas, hagas el Maratón de las Gildas, mitiquísimo pintxo local. Las calles más hot para descubrir el mundo Gilda y mimetizarse con el espíritu bilbaino son Pozas y García Ribero, en Indautxu (ver mapa), y Santa María, en el Casco Viejo (ver mapa). Si ves que, tras la caída libre al mundo pintxo, te vienes arriba y quieres tomarte unos gin&tonics ricos, atomatenota: La Destilería, en la calle Particular de Indautxu.
A la mañana siguiente, ya en plena mutación vasca, da un paso más en esta inmersión cultural y pásate por Sombrerería Gorostiaga (C/ del Víctor, 6, Casco Viejo). Aquí podrás hacerte con el cadillac de las txapelas, una auténtica boina Elosegui; sin duda no hay mejor experiencia que disfrutar del buen trato que se viene dando desde 1854.
Con esta compra eficaz bien resuelta, te recomiendo que agarres el tranvía desde el Casco Viejo y te bajes en el Palacio Euskalduna. Te espera una mañana intensa de conferencias, de las que abren el hambre tanto física como mentalmente.
Y como buen txapeldun con hambre, toca darle a la txuleta. El lugar, sin duda –y si te ves con ganas de emprender una excursión por los montes vascos y sus leyendas–, es Etxebarri, en Atxondo, a los pies del Monte Amboto. Mítico asador donde la carne a la brasa es toda una institución. A 40 minutos de Bilbao, la excursión merece la pena.
La digestión se presta para que le des rienda suelta al Basajaun (el Yeti vasco) que llevas dentro y te marques unos irrintzis (aullidos en esuskera) por esos poderosos montes; esto siempre es liberador.
A la noche es más que recomendable que te pases por el Cocktail de Bienvenida en el Museo Guggenheim, un marco incomparable para saludar a montón de colegas de profesión; techos altos.
La noche se te echará encima antes de que te des cuenta y, como por arte de magia, te volverás a encontrar con otro gin&tonic en la mano. La noche del viernes suele haber alguna fiesta del sector, la mejor manera de enterarte es estar muy atento a eso llamado hashtag del festival; rastréalo y sigue sus pistas.
Si ya de madrugada ves un autobús adornado con una txapela gigante ¡sube!: te llevará al Txoko del Terror, un invento de la casa de los hipsters de Tommy Hilfiger, con tintes raveros y mucho de los Gremlins. La mañana del sábado igual sigues allí y, con toda seguridad, desayunarás txuletón. Esta vez habrá sido Virgilio, el conductor del autobús, quien te lo habrá preparado a las ricas brasas.
Es hora de que vuelvas a la ciudad y una buena oportunidad para integrarte en el programa del Festival. A las 12:30 hay una conferencia que tiene muy buena pinta, corre a cargo de los integrantes del equipo de márketing de una marca reconocida de refrescos.
Igual está bien que comas unos pintxos y te vuelvas a tu guarida/hotel. Siesta y ducha para estar listo para la Gala, que empezará el sábado a las siete de la tarde. Si te toca recoger premio seguro que te despiertas; si este año la cosa no se dio bien igual saltas a la casilla de la cena de empresa.
Esta ultima noche tendrás complejo de Bill Murray en ‘Atrapado en el tiempo’: existe un 99% de posibilidades que hagas lo mismo que la noche del viernes, ¡mamarte como una marmota!
Nana nana na na na naaa naaaaa. ¡¡Y de propina aquí van unos imperdibles gastronómicos míticos que te harán vivir el auténtico espíritu bilbaíno!!
- Los sandwiches vegetales de El EME. Receta secreta. BUENÍIIIISIMOS. Un tentempié de Bilbao de toda la vida. Se pide un “triángulo” (C/ General Concha, 5).
- El txuletón de GOIZEKO IZARRA. Conviene reservar (C/ Gregorio de la Revilla, 9).
- Las rabas (calamares empanadas cortadas a tiras) de LA SOTERA (C/ Licenciado Pozas, 26).
- La cena “a la vasca” de KATE ZAHARRA, un caserío desde el que se puede ver todo Bilbao. Está en el monte y se recomienda disfrutar de las vistas con un buen gin&tonic en la azotea (C/ Zabalbide, 221).
- La carta básica pero rica, rica y de calidad de CASA RUFO, tienda de alimentación de toda la vida con restaurante al fondo. Muy recomendable (C/ Hurtado de Amezaga, 5).
- El pintxo de tortilla del BAR JOSERRA, un “bar común con tortillas extraordinarias” (C/ Particular, Indautxu).
- La palmera de chocolate de la PASTELERÍA MARTINA DE ZURICALDAY. Los pasteles típicos de Bilbao son el bollo de mantequilla y la ‘carolina’, pero sus palmeras son imbatibles en toda España (C/ Ercilla, 43).
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