Hood by Air acaba de protagonizar la penúltima locura porno-fashion firmando una colaboración con Pornhub (una de las principales webs pornográficas del mundo, no te hagas el loco) y subiendo a la pasarela de la New York Fashion Week modelos con el pelo que parecía que se les había venido encima el bukake del fin del mundo.
Desde la primera fila del desfile, Naomi Cambell contemplada entusiasmada la colección que al resto de los mortales nos puede parecer más o menos ‘WTF?’, pero que a la gente de la moda, taaaaaan de vuelta de todo les resultará transgresora, rompedora y hasta ponible. El desfile arrancaba con con ruidos de escupitajos, arcadas y gorgoteos para ir ambientando.
No es la primera ni será la última vez que sexo y moda caminan de la mano en las pasarelas (y sobre todo en las fotos de campaña). No hace falta que recordemos la infinita lista de marcas que han jugado con la provocación intentando llevarla al extremo y coqueteando con el cartelito de ‘banned’ que en los EE.UU., tan mojigatos ellos para algunas cosas, les da tremendo morbo. Parejas simulando fornicar, chavales con un parche en el ojo y el culo en pompa, sexos rasurados para jugar a cifras y letras, “cubanas aromatizadas”, colecciones que solo se pueden ver en x-tube y una campaña de Diesel tan original como divertida.
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