Cuando Little Richards se sentó al piano, los técnicos de los estudios RCA lo tuvieron claro: “La música del diablo acaba de aterrizar”. En ese momento nació la famosa canción ‘Tutti Frutti’ y la onomatopeya que da título a este anecdotario. ‘A Bam Bam Boo Loo Ba’, de la Editorial Expediciones Polares, es una maravilla ilustrada que recoge ésta y muchas más curiosidades y extravagancias del Rock ‘n’ Roll.
“Es únicamente un aperitivo de lo sucedido en aquella época”, afirma Javier Polo, el ‘escritor casual’ que ha puesto letra a los característicos dibujos de la artista Saioa Burutaran. Lo que iba a ser una exposición de arte se convirtió en una guía a dúo de la época más salvaje. “Entre mediados de los años sesenta y mediados de los setenta, por su implicación creativa, la experimentación musical, las drogas y la situación sociopolítica de la época surgieron una gran cantidad de historias que contar”, apuntan.
El libro es el resultado de una gran labor de documentación, un repaso por las entrañas del rock en biografías, revistas o libretos de LP’s. “Es un proceso muy sesudo porque hay muchas versiones y mitos de cada historia. Al final, rebuscando e investigando acabas dando con la versión más sensata y cercana a la realidad”.
La patada que Elvis le calzó a Alice Cooper después de pedirle que lo matara, la sonrisa desdentada de Chet Baker o la especie de ‘pollocks’ que los Stooges firmaron con sangre en las paredes de la Fun House. Saioa se ha encargado de resumir en ilustraciones todas estas anécdotas. Probó numerosas técnicas, pero al final se decantó por su trazo un tanto peculiar y aniñado. Lo que sorprende y se agradece en esta invasión de arte digital.
Si tuvieran que elegir una, ella se queda con la extravagancia de Gram Parsons. “Fue la primera que ilustré y porque me dejó atónita. Gram hizo un pacto con un amigo: cuando uno de ellos muriese, sería enterrado en el desierto. Cuando falleció Parsons, sus amigos robaron su cuerpo del depósito de cadáveres y con unas botellas de whisky y una gran hoguera cumplieron el sueño del músico”.
El proceso de creación se describe en las primeras páginas del libro. Javi escribe en la terraza, sentado en una silla coja. Saioa dibuja en la habitación. Mientras, ambos escuchan música. “Solíamos escuchar al grupo en cuestión, por eso de la inspiración. En realidad no importa lo que escuches, pero cualquier banda incluida en ‘A Bam Bam Boo Loo Ba’ te va a poner más en el ambiente adecuado para su lectura”.
‘A Bam Bam Boo Loo Ba’ forma parte del cuidado catálogo que está construyendo Expediciones Polares, una editorial independiente con sede en San Sebastián.